La lucha da sus frutos
Una sonrisa se dibujó ayer en la cara de todos los vecinos de Arcosur que, por primera vez, pudieron entrar en las que, ahora sí, son sus casas. Desde las 12.30 horas, las familias fueron llegando para realizar un acto por el que han luchado sobremanera en los últimos tiempos: recoger las llaves del que será su nuevo hogar.
Raúl Chueca y Aranzazu Escudero acudieron a la cita acompañados de los padres de él y con la ilusión por bandera. Para él, el hecho de abrir las puertas de su casa demuestra que “la lucha acaba dando sus frutos”. Se mostraba muy satisfecho y contento y aseguraba que “no veía el día en que llegara ese momento”. Echando la vista atrás, recordaba los días en los que pensó dejarlo todo y ahora se sentía feliz de, definitivamente, “poder palpar su casa como una realidad”.
Chueca pertenece a Arqueros y aseguraba que, en muchos momentos “de bajón”, el apoyo del resto de sus compañeros fue vital y que ya se habían convertido en una “gran familia”. Empezaron a pagar las cuotas en el 2005 y, en muchos momentos, pasó miedo porque eran “los ahorros de toda la vida” los que estaban en juego.
Su pareja explicaba que durante todo el día había vivido “un cúmulo de sensaciones” y que se dará cuenta, con el paso de los días, de que “ya es una realidad”. Llegamos a plantearnos, comentaba, el comprar en otro lugar pero era ya mucho “el dinero invertido”. Ahora ya solo les queda amueblar la cocina, tener luz y agua y, en ese momento, podrán disfrutar de una vez de ese hogar que tanto les ha costado conseguir.
Fuente: El Periódico de Aragón