Para más de un centenar de zaragozanos, los pisos de Arcosur ya no se corresponden con un plano, un sueño que nunca llega o una inversión económica de más de siete años. Las viviendas tienen ya unas medidas tomadas de la mano de sus propietarios, luminosidad casi familiar, fresco el olor de la última capa de pintura y, por delante, un futuro lleno de expectativas.

Con destino a la urbanización Rincón del Cielo número, 6, ‘voló’ ayer a última hora de la tarde el primer grupo de futuros vecinos de Arcosur, impaciente y muy nervioso por conocer los más de 60 pisos de las escaleras 1, 2, 3 y 4. Acompañados por familiares (hermanos, padres, sobrinos…), acudieron armados con cámaras de fotos y ordenadores, con metros en el bolsillo, incluso había parejas que se llevaron al carpintero para que fuera tomando medidas de la cocina.

Miembros de la Junta de Compensación y el director de la obra, entre otros, recibieron al grupo en el patio interior de la urbanización, donde explicaron el recorrido a seguir. De aperitivo, un paseo rápido por la zona ajardinada común, las dos plantas de parquin y los trasteros. De plato principal, dos horas para disfrutar individualmente de los pisos.

«¡Menuda plaza de garaje! ¡Pero qué grande!», valoraba Isabel Ramo, emocionada. Otros se metían en cualquier rincón siguiendo las indicaciones de un cabecilla de grupo que alentaba a «alcahuetear por ahí». Los dueños se fotografiaron en los aparcamientos y trasteros y sacaron el metro para calcular si podrían aparcar el coche y la moto dentro de la misma marca de parquin.

Fuente: Heraldo